Lo mejor de la vida, lo hecemos nosotros cada día, seamos felices...

sábado, 9 de abril de 2011

¿Hacia dónde queremos caminar los peruanos?



¿Qué es lo que nos pasa a los peruanos?, ¿qué paso con la sabiduría y el orgullo peruano que empezaba a emerger?, ¿acaso no somos capaces realmente de construir nuestro propio éxito?, ¿resulta tan fácil convencer al peruano que siempre es un perdedor y que está destinado para ser ciudadanos de segunda clase?, ¿así de fácil nos damos por vencidos para a dejarnos arrastrar de las narices y convertirnos en mendigos de los caprichos del autoritarismo y la falta de escrúpulos de esos gobernantes de una época ya retrasada en todo sentido?.



Seguramente es lo que nos preguntamos la mayoría, como muchos amigos extranjeros nos lo preguntan, como explicarle en unos años a nuestros hijos este fenómeno, que espero solo sea un mal espejismo, como explicarle a nuestros hijos cuando nos pregunten ¿Por qué hemos permitido que después de haber luchado tanto para recuperar la democracia del gobierno más corrupto y sanguinario de la historia, los peruanos se olviden de esas épocas y nuevamente pretendamos entregarles nuestro destino como si nada hubiera pasado? Definitivamente en algunos años más adelante, yo no quiero decirle a mi hijo, que no me importaba el PERÚ, sino, solo mi bienestar, que en esa época (o sea ahora) solo nos interesaba el bienestar de uno mismo y los demás no interesaban (incluyéndolos a ellos, porque eso es lo que están haciendo ahora quienes piensan convertir al COMANDANTE Humala o a la hija del GENOCIDA Fujimori en el futuro presidente de nuestra golpeada patria, y más aún a aquellos que por codicia personal, o por defender intereses ajenos al PERÚ, siguen dividiéndonos a quienes nos sabemos demócratas, jugando obviamente a favor de estos dos indeseables de la política), me imagino de repente a mi hijo, a los hijos de mis amigos y posiblemente a los hijos de todos los peruanos ya en esa época, mirándonos con lástima, con impotencia de ya no poder corregir el gravísimo daño que se le ha hechos a la patria que ellos han heredado, me imagino a los niños de hoy y a los hombres del mañana, sintiendo más o menos la misma desesperanza que en algún momento nosotros también hemos sentido y que ya lo estábamos olvidando, porque empezábamos a mirar con ilusión, optimismo y con gran expectativa el futuro que se empezaba a asomar por el horizonte de nuestra mirada.



Decía antes, como explicarse, y como explicar a nuestros hijos, que en este tiempo, justo cuando al PERÚ empezaba a alumbrarle la luz del futuro como una nación próspera, con desarrollo, con una ya gradual vivencia de la modernidad que nos permitía incluso competir con los llamados países del primer mundo (o sea, con los países desarrollados), justo cuando sentíamos que se habían quedado ya en el estante oscuro, sucio y olvidado de nuestra historia, aquellos personajes que se habían dedicado a destruir, a saquear, a dividirnos como hermanos para matar nuestra incipiente fortaleza de sentirnos orgullosos de haber nacido en la tierra de los indómitos INCAS, justo en ese momento aparecen estos personajes Humala y Keiko Fujimori, el primero, un futuro dictador, títere de otro extranjero de su misma calaña, capaz de organizar matanzas y culpar a su propio hermano para no ir a la cárcel como el verdadero responsable de dicho genocidio (“Andahuaylazo”); y la segunda, totalmente incompetente, incapaz también de hacer algo por sí misma y siempre evocando con orgullo al criminal de su padre, queriendo aparecer como si no hubiera conocido las atrocidades del gobierno más corrupto de la historia y del cual ella fue partícipe directamente, como confiar en ella, si fue capaz de darle la espalda a su propia madre cuando denunciaba las torturas a la que fue sometida por parte del propio Fujimori y en las narices de sus hijos; y para el colmo y desgracia del PERÚ, los mismo que fueron afectados por estos personajes deciden algunos, nublar los ojos y sus mentes y apoyarlos, mientras que otros apoyarlos seguramente la mayoría por desconocimiento o también por algunos errores de los gobiernos demócratas, como se puede entender, que apenas estos personajes merodean el ambiente político decidamos echar todo al tacho de la basura e ir conjuntamente por el desagüe de la historia, incluso sabiendo que mediante sus propios documentos, se ufanan de querer tumbarse todo, pero de repente, lo más triste, es que, algunos que pensábamos demócratas e intachables, decidan hacerles el luego no sé si intencionalmente o bajo que intereses, y llevan al PERÚ posiblemente al atraso más repugnante que haya registrado la historia peruana, y de cual, no sé si la vida nos alcanzará para volver en algunas décadas a recuperar al PERÚ de las garras y dientes de estos lobos y víboras ahora disfrazados con pieles de demócratas.



Voy a hacer un último esfuerzo, el mismo que he venido haciendo con algunos jóvenes y desconocidos de la época en que combatimos a la dictadura desde fines de los noventas, y si algunos sobrevivimos a la dictadura no es porque posiblemente para algunos dejó de ser un deporte el disparar o descuartizar a cuanto oponente tenían en las calles, sino porque los que luchábamos teníamos la convicción de algún día ver al PERÚ nuevamente libre y permitir que la gente elija y opine libremente, voy a invitar en silencio a tu conciencia a unirte para que el PERÚ siga adelante a pesar de los errores inevitables del ser humano, pero que por nuestro egoísmo, no les neguemos a las nuevas generaciones esa esperanza que ya empieza a brillar en nuestro horizonte, yo quiero unirme a ese sueño que se va convirtiendo en realidad, de repente ya no para nuestra generación, pero si para la de nuestros hijos y los hijos de ellos, a los jóvenes siempre se les ha utilizado aduciendo que no conocían la historia, pero ahora nuestra juventud es diferente, es más lista, por eso creo, que justo al momento de ir a votar usaremos la razón, y nos daremos cuenta si somos capaces de mandar al olvido a esos personajes o sentenciamos a nuestro PERÚ y con él, a nuestro futuro y a nuestros hijos.



Solo sugiero, porque estoy convencido que a pesar de los defectos de la democracia, que el Sr. ALEJANDRO TOLEDO es el más indicado, sobre todo por su EXPERIENCIA, porque representa al peruano que emerge y por la visión de estadista que siempre ha demostrado incluso sacrificando su propia imagen, además creo es el más capacitado para conducir los destinos del PERÚ sin desmerecer al ex ministro Kuczynski pero que lamentablemente por todas las estadísticas mostradas al momento, no hay forma de poder ganar a cualquiera de los dos personajes siniestros ya mencionados, y justamente por esa irresponsabilidad del Sr. Kuczynski de repente sin quererlo estamos a punto de desviarnos de la democracia hacia el desorden y a la dictadura y debemos mirar al PERÚ y no a los apetitos personales, pero también para decirle a nuestra patria, que ya hemos evolucionado y que no somos los tontos útiles que le hacen el juego a quienes quieren hacer del PERÚ una nación de oprimidos y títeres de los manipuladores que se aprovechan de la buena fe y de la sencillez de nuestro pueblo, para que en algunos años podamos contestar con orgullo a nuestros hijos y quizás a otras generaciones, que sí hicimos algo por el PERÚ y por ellos, y sobre todo para sentirnos tranquilos que algún ejemplo de vida les estamos dejando, ¡unámonos por el PERÚ, unámonos por nuestra verdadera libertad, unámonos por un país justo, libre y moderno para nuestros hijos, unámonos para que esa escoria política no le vuelva a faltar el respeto ni al PERÚ, ni a la libertad de los que heredarán nuestras acciones de hoy!.


“Las acciones que trascienden en el tiempo, solo con el tiempo se pueden apreciaren su verdadera dimensión”

No hay comentarios: